Emprender

Cuando estás empezando un negocio el primer gran quebradero de cabeza suele ser que los números cuadren a final de mes.

En este momento entra en juego la gestión financiera, el instrumento que permite conocer la solvencia de una empresa y que se debe controlar desde el principio, pues va a ser uno de los indicadores que van a darte información sobre si vas por el buen camino. Si eres emprendedor, serás tú mismo el que se encargue de este departamento.

Por esta razón, en los primeros pasos de un negocio serás inversor, contable, desarrollador de producto y comercial. En definitiva, tú serás tu propio negocio. 

Ciertas personas, para salir del desempleo o trabajar por cuenta propia, apuestan por crear un negocio y ser emprendedores. Son ya muchas las ferias, eventos y charlas que se hacen por y para el emprendimiento. Cada vez este proceso está teniendo un éxito más notable y despertando conciencia entre la población, generando interés por la formación relacionada con lograr éxito empresarial.

Una startup es el comienzo del éxito de muchas de estas personas. Hablamos de startups cuando nos referimos a empresas emergentes basadas en tecnología. Gracias a los avances en el mundo digital, que una startup funcione puede depender de su dotación en herramientas de gestión adecuadas para que el proyecto arranque.

Hoy en día el comercio es doméstico pero a la vez, global. Puedes vender desde tu casa, pueblo o ciudad  a cualquier lugar del mundo. A través de una página web, un blog o incluso sin presencia en internet, tan solo disponiendo de un pequeño lugar en plataformas como Amazon , puedes tener clientes para tus  productos o servicios en cualquier lugar del mundo. Pero lo que es fácil para ti, también lo es para tus competidores.

¿Y como podemos destacar de los demás? ¿sabes que los medios de pago que establezcas para tu venta puede darte una ventaja?  

Independientemente de tu ocupación profesional, como persona trabajadora, empresaria o emprendedora seguramente te interesen las pautas a seguir en la gestión de proyectos con Business Strategy.

Si tienes un proyecto entre manos, habrás comprobado que la planificación de recursos es necesaria pero todavía lo es más disponer de una estrategia empresarial, basada en datos, con la que poder controlar además de en qué medida estamos alcanzando los resultados esperados, cómo esta nos acerca o nos aleja de los objetivos marcados previamente por la dirección empresarial.