Cuando hablamos sobre negociación, en ocasiones tendemos a pensar que es una capacidad tan sólo requerida en el mundo laboral y principalmente reservada para algunos perfiles, como agentes comerciales, responsables de ventas y/o compras, etc., pero lo cierto es que la negociación aparece de muchas formas a lo largo de nuestras vidas, siendo prácticamente una constante: en un mercadillo, dentro de un equipo deportivo, al solicitar un aumento de sueldo y cómo no, a la hora de conseguir un trabajo.
Toda empresa debe hacer una reflexión previa sobre cuáles son su misión y visión empresariales. Meditar sobre estos aspectos es necesario para no perder el foco de lo importante en el negocio. Es evidente que son dos conceptos susceptibles de ser revisados a lo largo de la vida de la empresa y se deben adaptar a cada momento y a sus circunstancias concretas.
Recientemente os hablábamos del taller que impartimos sobre Búsqueda de Empleo a través de las Redes Sociales englobado en la iniciativa Femxa Summer School y aprovechamos también el post de hoy para seguir reflejando las conclusiones que sacamos en él.
Uno de los puntos que mayor interés generó entre los participantes fue Claves para crear un currículum creativo, aplicando la estrategia de marca personal como herramienta para llamar la atención de los reclutadores de talento mientras nos diferenciamos de nuestros posibles competidores.
La revolución tecnológica que hemos vivido bajo la denominada Revolución Digital ha puesto encima de la mesa nuevos medios de comunicación y contenidos más adaptados a los mismos que vienen a cubrir una demanda de nuevas formas de distribuir y de consumir contenido.
En este nuevo escenario, el contenido multimedia, es decir, aquel que utiliza múltiples medios de expresión físicos o digitales que pueden ser texto, imágenes, animaciones, audios y/o vídeos.; es el rey de los nuevos procesos comunicativos.
En uno de nuestros talleres gratuitos de verano que impartimos en Vigo dentro de la iniciativa #FemxaSummerSchool, hablábamos sobre cómo usar de forma apropiada las redes sociales para la búsqueda de empleo.
Al comentar este tema con los asistentes, se reafirmó mi impresión previa de que gran parte de la población en búsqueda activa de empleo no confía en las redes sociales como canal para obtener un puesto de trabajo, aunque siempre existen excepciones y casos reales entre los asistentes, de personas que sí han accedido a un empleo a través de Linkedin, Twitter y Facebook, precisamente por ese orden.
Los beneficios y las oportunidades que brindan a las empresas las diferentes redes sociales como herramientas de comunicación son infinitos y no cabe duda que la presencia en las redes sociales para ellas es ineludible.
De entrada existe un retorno, que será inmediato, al darse a conocer entre la audiencia, obteniendo nuevos clientes y fidelizando su relación con los actuales, pueden mejorar su servicio postventa o resolver dudas a clientes o prospectos. Además las empresas pueden mostrar su cara más amable y cercana haciéndose accesibles a través de estos medios y sobre todo aportar mucho de su conocimiento sobre el sector en el que desarrolla su actividad, generando contenido de valor y difundiéndolo en las diferentes redes sociales.
Desde que en 1989 Stephen Covey publicara su best seller de auto ayuda “Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva” se ha escrito mucho sobre este tema. Me parecía interesante hacer una revisión acerca de estas ideas en un momento en que nos acechan las tareas que consumen gran parte de nuestra energía y nos hacen perder el foco de lo que realmente es importante.
La entrevista de trabajo supone en muchos casos el paso definitivo en un proceso de búsqueda de empleo, lo que añade una presión extra a la situación, puesto que nos estamos jugando mucho en ese momento, y no queremos echar por tierra toda la labor previa realizada para llegar hasta ella.
Por eso, debemos prepararnos ante todo y estar al tanto de las preguntas más incómodas que nos puedan plantear. Veamos las 3 más recurrentes y que suelen ser decisivas a la hora de descartas candidatos.
Desde luego, debemos preparar cada entrevista de forma individualizada, informándonos sobre la empresa que contrata y el tipo de puesto ofertado. Por lo demás, existen una serie de cuestiones comunes a casi cualquier sector que debemos tener en cuenta: