Para entender la profesión que hoy conozco bien, también es importante mirar brevemente de dónde viene. La terapia ocupacional nació de una necesidad durante la Primera Guerra Mundial, en un contexto en el que hubo más heridos de guerra y mutilados que nunca.
La enfermedad, la dependencia y la ausencia de satisfacción de las necesidades básicas dieron pie a esta disciplina.
Índice
Qué es la terapia ocupacional
La terapia ocupacional es una disciplina sociosanitaria que se encarga de promover la salud, el bienestar y el funcionamiento a través de la implicación activa de las personas en sus ocupaciones.
La ocupación es la principal herramienta de la terapia ocupacional, así que es primordial definirla para entender esta profesión. Se considera ocupación a toda aquella actividad significativa en la que la persona participa de forma cotidiana, desde el autocuidado, el ocio y la participación social, hasta las tareas del hogar o el desempeño laboral.
Cuando una persona, por motivos físicos, cognitivos, emocionales o del entorno, no puede desempeñar por sí misma estas ocupaciones, su autonomía, su identidad y su calidad de vida se ven afectadas. Y es aquí donde la terapia ocupacional cobra especial relevancia.

De qué se encarga la terapia ocupacional
La terapia ocupacional tiene como principal objetivo favorecer que las personas alcancen una participación plena en sus actividades de la vida diaria, de manera que logren un estilo de vida independiente, productivo y satisfactorio.
Pero no cualquier actividad ni cualquier intervención puede considerarse terapéutica. Debe tener unas características muy concretas: estar orientada a un objetivo claro, tener sentido para quien la realiza y aportar algo útil a su proceso, ya sea prevenir una pérdida de capacidad o potenciar habilidades que ya tiene. Por este motivo, la terapia ocupacional combina el uso de actividades significativas con otras intervenciones como la adaptación del entorno o el uso de productos de apoyo, siempre con el fin de favorecer la participación y la autonomía.
El terapeuta ocupacional es el profesional que lleva a cabo esta intervención: evalúa, planifica y aplica los métodos adaptándola a las necesidades de cada persona. Este proceso incluye varias fases:
- Evaluación: Se identifican las características de la persona, su entorno y sus necesidades. Para ello, se pueden utilizar escalas de valoración. Se realiza su perfil ocupacional y se analiza su desempeño ocupacional.
- Planificación: Se diseña un plan de intervención, basado en la información recogida durante la evaluación, que incluye la propuesta de objetivos a corto y largo plazo. Es importante realizarlo acorde a los deseos y preferencias de la persona.
- Intervención: Es el desarrollo de las actuaciones específicas diseñadas en el plan de intervención. Es importante tener en cuenta la evolución de la persona, realizando un seguimiento continuo que permita introducir modificaciones en caso necesario.
Ámbitos de actuación
La Terapia Ocupacional puede desarrollarse en en diferentes ámbitos, recursos y niveles asistenciales, tanto públicos como privados.
Interviene con personas de todas las edades (infancia, adolescencia, adultez y vejez) que presentan o puedan presentar dificultades para participar de forma autónoma y significativa en su vida diaria.
A continuación, explico los principales ámbitos de actuación de la terapia ocupacional:
- Ámbito sanitario: Interviene tanto en atención primaria como especializada, en hospitales, centros de salud, clínicas y mutuas. Las áreas de trabajo incluyen salud mental, rehabilitación física, atención temprana y unidades específicas (quemados, neurología, reumatología, etc.).
- Ámbito social y sociosanitario: Se extiende a recursos y dispositivos comunitarios, como residencias y centros de día, atención domiciliaria, pisos tutelados, centros de menores, casas de acogida y programas de exclusión social, centros ocupacionales, de rehabilitación psicosocial y laboral, y centros penitenciarios. Se trabaja con diversos colectivos: personas con discapacidad, personas mayores, inmigrantes y refugiadas, víctimas de violencia o maltrato, y población en riesgo social.
- Ámbito educativo: Puede intervenir en centros escolares ordinarios y de educación especial, centros de formación profesional y universidades. Además, participa en programas de prevención y promoción de la salud.
Coordinación con el equipo multidisciplinar
El/la terapeuta ocupacional trabaja dentro de un equipo interdisciplinar, colaborando con profesionales de diversas áreas (medicina, psicología, fisioterapia, trabajo social, enfermería, entre otros) para ofrecer una intervención global.
Este trabajo conjunto consiste en compartir objetivos, planificar de manera coordinada y tomar decisiones de forma conjunta, siempre con la persona en el centro. La comunicación clara, el respeto y la confianza son fundamentales para que el trabajo en equipo funcione y tenga impacto en la calidad de la atención.
La terapia ocupacional aporta una mirada orientada al desempeño en las actividades de la vida diaria, a los hábitos, roles y rutinas, y al impacto del entorno en la autonomía. Sin esta perspectiva, la comprensión de la situación de la persona es incompleta.
Beneficios de la terapia ocupacional
La terapia ocupacional tiene numerosos beneficios para las personas que enfrentan desafíos físicos, cognitivos, emocionales o relacionados con el entorno. Entre sus principales aportaciones se encuentran:
- Mayor autonomía en la vida diaria: ayuda a recuperar o mantener la capacidad de realizar actividades cotidianas (vestirse, asearse, cocinar, desplazarse...), lo que permite vivir con independencia.
- Mejora la funcionalidad: combina el trabajo de capacidades físicas (movilidad, equilibrio, coordinación, fuerza) y cognitivas (memoria, atención, planificación, percepción) para que la persona pueda desenvolverse en sus ocupaciones diarias.
- Bienestar emocional y social: fomenta la autoestima, reduce el estrés y la frustración, y ayuda a mantener roles, promoviendo la participación con el entorno.
- Prevención y adaptación: mediante el uso y entrenamiento de productos de apoyo y modificaciones del entorno, previene complicaciones, facilita la seguridad y prolonga la autonomía. En definitiva, la terapia ocupacional mejora la calidad de vida.
Cómo formarse en terapia ocupacional
El primer paso para convertirte en terapeuta ocupacional es obtener el Grado en Terapia Ocupacional, una titulación universitaria con una duración de cuatro años y formación teórica y práctica. Pero la formación no termina ahí. La terapia ocupacional es una profesión en constante evolución y requiere mantenerse actualizado/a.
En Femxa puedes encontrar cursos orientados al ámbito sanitario y sociosanitario que permiten ampliar conocimientos, incorporar nuevas herramientas de intervención y mejorar la práctica diaria con las personas usuarias.
Si quieres consultar la oferta formativa y comenzar a especializarte en este ámbito sanitario, tanto desde un puesto de Terapeuta Ocupacional como desde otros puestos de trabajos del sector de la salud, puedes hacerlo accediendo a nuestra selección de cursos bonificables para Sanidad y Salud.
