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Tipos de Contratos en 2018

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Jueves, 01 Febrero 2018 12:53 Escrito por

España es uno de los países con más tipos de contratos de trabajo diferentes. Durante los últimos años se ha hablado sobre la posibilidad de formular un contrato único, pero hoy en día las posibilidades de implantarlo son demasiado remotas y la variedad de contratos no deja de crecer.

En nuestro país los contratos de trabajo pueden celebrarse tanto por escrito como de forma oral, entendiéndose como contrato de trabajo la existencia de un acuerdo entre trabajador y empresario por el que se presten unos servicios bajo la dirección y organización de éste a cambio de una retribución económica para el trabajador.

Te invito a que profundices más en esta guía para conocer los tipos de contratos más utilizados durante el año 2018.

Antes de conocer los diferentes tipos de contratos que existen actualmente debemos definir antes qué es un contrato de trabajo.

Qué es un contrato de trabajo

Un contrato de empleo es un documento legal escrito que establece los términos y condiciones de una relación que regula la actividad laboral entre un empleado y un empleador vinculante. Existen diferencias en los contratos de trabajo del sector privado y público debido a que los objetivos de un contrato de trabajo son diferentes.

Además, podemos encontrar también diferentes contratos en función de si queremos ser asalariados o trabajadores autónomos. Veamos ahora las distintas modalidades de contrato de trabajo que podemos encontrar.

Tipos de Contratos de trabajo

En España y tras las reformas laborales que se han ido produciendo, además de las últimas aplicadas en los últimos años, podemos encontrar cuatro tipos de contratos de trabajo para las personas que sean asalariadas o presenten sus servicios a una empresa. La legislación establece que los contratos se celebran por escrito y en algunos casos también de forma verbal, aunque en la práctica casi todos se firman por escrito, ya que ofrece más seguridad a ambas partes.

Contrato indefinido

Es un contrato establecido sin especificar límite de tiempo. Y suelen ser de tiempo completo (8 horas) a menos que se establezca con el empleador que va a ser a tiempo parcial.

Este es el principal contrato estándar y el tipo que pretende ser estimulado según la ley actual, a pesar de que las estadísticas sobre el empleo muestran que sigue siendo el menos utilizado.

Dentro de los contratos indefinidos podemos encontrar además de distintos tipos ya que las reformas en la ley han establecido también contratos indefinidos para discapacitados (con un mínimo grado de discapacidad de un 33%) así como los que tienen relación con apoyar a los empresarios. La idea es facilitar un trabajo estable y fomentar las iniciativas empresariales de las empresas con al menos 50 trabajadores. Estos contratos son siempre por un período indefinido de tiempo completo. Hay ciertos incentivos fiscales para la empresa (deducciones sobre la tasa de impuestos y cotización a la Seguridad Social).

Contrato temporal

Este tipo de contrato tiene como objetivo establecer una relación que regule la actividad laboral entre empresario y trabajador por un tiempo determinado. La jornada puede ser completa o parcial.

Ha de formalizarse por escrito, aunque también puede hacerse de forma verbal siempre que la duración determinada del mismo sea inferior a cuatro semanas y el tipo de jornada sea completa.

Se pueden dar como situaciones de temporalidad:

  • Según el objeto de la contratación: situaciones de obra y servicio, eventual por circunstancias de producción e interinidad
  • Por su finalidad de incentivación del empleo: fomento de empleo de personas con discapacidad, trabajadores en situación de exclusión social o situación de vinculación formativa.
  • Por su función específica: impulso a la actividad investigadora, personal investigador o el de incentivo a la contratación temporal para trabajos subvencionados de interés social.

Tipo de contrato de trabajo temporal avalado por el SEPE.

Contrato en prácticas

Para los estudiantes, los contratos de prácticas son los que les permiten poder adquirir algo de experiencia en relación con los estudios que estén cursando, pero no es solo cuestión de conseguir experiencia en un trabajo determinado, sino también de que esa experiencia sirva para los estudios que se están cursando.

El objetivo de este tipo de contratos es que los recién graduados con título universitario o de otro tipo accedan a un puesto de trabajo en el que puedan empezar a adquirir experiencia en puestos relacionados con su formación. La duración de este tipo de contratos con práctica profesional puede ser desde seis meses hasta dos años, con un máximo de dos prórrogas. 

Contrato de formación

Su nombre completo es Contrato para la formación y el aprendizaje. Este otro tipo de contrato suele realizarse a trabajadores que previo a trabajar deben formarse para ello. De este modo, este contrato de formación sirve para el trabajador mientras aprende el oficio que debe desempeñar pero cuando a la vez, ya está trabajando. Suele ser destinado a jóvenes (se establece para jóvenes entre 16 y 30 años) y tiene duración determinada de entre 1 y 3 años. Una vez finalizado ese periodo se suele producir a hacer un contrato indefinido.

Desde su aparición como modelo de contratación, los contratos para la formación y el aprendizaje han ido aumentando su presencia en el mercado laboral, al ser un tipo de contrato beneficioso tanto para el trabajador como la empresa. Desde Grupo Femxa creemos en este modelo de contrato. Consideramos que es una buena forma de fomentar la formación y empleabilidad de los trabajadores, ya que abogamos por la verdadera formación dual. Entra en nuestra web especializada en Contratos de formación y podrás conocer al detalle este tipo de contratación y los beneficios que ofrece.

Contratos mercantiles (trabajadores autónomos)

Los contratos mercantiles de prestación de servicios establecen relaciones comerciales entre dos personas físicas o jurídicas, es decir, son contratos que se realizan entre dos empresas o una empresa y un autónomo para la prestación de sus servicios. Por ello el autónomo debe calcular bien cuales son los costes de trabajo de sus servicios y realizar un buen presupuesto, incluyendo su beneficio.

Existen diferentes tipos de contratos mercantiles según el objetivo que posea cada uno de ellos, dependiendo de la actividad del prestador, el cliente o los objetos del contrato.

Este modelo de contrato mercantil ha sido diseñado por el portal Infoautónomos se puede adaptar fácilmente dependiendo de la actividad que vayas a realizar o para la contratación de autónomos.

Subtipos de contratos

El Gobierno llevó a cabo una reducción de los modelos de contrato que existían reduciéndolos a los cuatro grandes tipos de contrato que acabamos de ver. Sin embargo, estos modelos no se ajustan siempre a las necesidades de las empresas que formulan nuevos contratos añadiendo diferentes clausulas y fórmulas que adaptarán las condiciones del contrato a las necesidades de la empresa y las características del trabajador que accede a un proceso de selección.

Estos nuevos tipos son, por ejemplo, el contrato por obra y servicio, el contrato eventual, el contrato de interinidad, de relevo, de trabajo a domicilio o fijo-discontinuo.

 Infografía tipos de contratos

 

Esperamos que esta guía haya aclarado tus dudas respecto a los contratos que más se utilizan en nuestro país y mejore tu conocimiento de cara a un posible proceso de selección de personal. Si deseas ampliar tu información te incluimos  el link al BOE sobre los diferentes tipos de contrato y la guía de contratos que ofrece el SEPE que recoge toda la normativa vigente en materia de contratos de trabajo e incentivos a la contratación.

También, te incluimos nuestro post sobre formación y acceso a un contrato de trabajo donde explicamos la estrategia de emprendimiento y empleo joven que ha puesto en marcha el ministerio de Empleo y Seguridad Social. Por último, te recordamos que la mejor forma de acceder a un buen puesto de trabajo es desarrollar nuevas competencias profesionales y mejorar las existentes. Para ello, dispones de diversas opciones formativas, así que, ya sea a través de cursos subvencionados o formación privada, ¡no dejes de ampliar tus conocimientos! 

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